El 1 de febrero de 2017, el jefe de policía de la comunidad Choréachi (Pino Gordo), Juan Ontiveros Ramos, fue secuestrado y asesinado. Acababa de regresar de Chihuahua, en donde se había presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), junto con las autoridades tradicionales del pueblo, para informar sobre la inseguridad y la violencia en su comunidad de origen.

En Choréachi existe un conflicto sobre los derechos territoriales entre la comunidad indígena y las autoridades locales que talan los árboles y tienen cultivos de drogas en el terreno del ejido Pino Gordo. Esto sucede con la autorización de la agencia medioambiental mexicana SEMARNAT. La comunidad indígena interpuso una demanda contra la agencia en el Juzgado. Los cárteles de la droga, que también están involucrados en la industria maderera, han asesinado a cinco líderes indígenas en Choréachi en los últimos años.

EllenSchriek@korima.de
Hans-WalterSchmuhl@uni-bielefeld.de