Los pueblos indígenas de la Sierra Tarahumara se tienen que enfrentar cada vez más a problemas ecológicos. Debido a la tala de la sierra con sus densos bosques, el balance hídrico está desequilibrado y el volumen de precipitaciones disminuye.

El problema aún más grave es la contaminación de las aguas, causada por la industria maderera y el consumo de agua de los aserraderos, así como por la reactivación de la minería. Para los pueblos indígenas es cada vez más difícil tener acceso a agua potable.
Para superar este problema, entre 2009 y 2012 fueron construidas más de 50 cisternas en las comunidades indígenas de la Sierra Tarahumara. La primera fue construida – con la ayuda financiera de nuestra asociación Kórima – en el terreno de la cooperativa de Mujeres Indígenas Tarahumaras y Tepehuanas A. C. (MITYTAC) en Baborigame. Luego se construyeron más cisternas en los pueblos vecinos. Se utilizó una técnica sencilla para que los trabajadores de los pueblos indígenas, que habían ayudado en la construcción de las cisternas, pudieran compartir sus conocimientos. La recogida de aguas pluviales resulta menos difícil que la perforación de pozos. Con el tiempo ha mejorado el suministro de agua potable notablemente.

EllenSchriek@korima.de
Hans-WalterSchmuhl@uni-bielefeld.de